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lunes, 15 de septiembre de 2014

Noticia IDEAL:Las aportaciones ciudadanas hacen posible la ruta dedicada a Muñoz Molina


La alegría de la misión cumplida. Bajo esta consigna triunfadora volvía a redoblar en la plaza de San Lorenzo el mensaje de reconocimiento y admiración hacia el talento universal del escritor y académico ubetense Antonio Muñoz Molina. Se celebraba así la culminación de una iniciativa privada en forma de tributo que el artista salvadoreño afincado en la ciudad, Mauricio Jiménez Larios, ha venido persiguiendo desde que Muñoz Molina recibiera Pl premio Príncipe de Asturias: transformar de alguna forma Úbeda en Mágina, en la ciudad imaginaria reflejada en novelas como 'El jinete polaco', 'Beltenebros', 'Beatus Ille' o 'El viento de la luna'.
La fórmula para lograrlo y materializar así el propósito consistía en la colocación de placas de cerámica, a modo de ruta literaria, en aquellos lugares de la ciudad a los que se les dio la denominación ficticia que tienen en Mágina. Y a ellas se añadieron otras marcando puntos importantes en la vida de Muñoz Molina, como los sitios donde vivió o estudió.
Pero aunque en un primer momento la idea fue llevada a cabo, ésta no cumplía del todo con lo pretendido ya que la falta de músculo económico provocó que las placas fijadas por aquel entonces fueran de cartón, pervirtiendo de esta forma el sentido original.
Afortunadamente, gracias a la implicación ciudadana, todas ellas han sido finalmente sustituidas poco a poco por otras iguales pero de cerámica, recobrando así la idea primigenia del proyecto. De este modo, y ahora con total eficacia, la plaza de Andalucía de Úbeda vuelve a ser la del General Orduña, las Antiguas Carnicerías retornan a la oficina del comisario, y así hasta casi una veintena de enclaves del callejero ubetense. Sin duda, hay metáfora de por medio y motivos para estar contentos. Y es que el cambio de material lleva aparejado el tránsito de la inestabilidad a la consistencia, de la recreación a la realidad.
El acto
El acto desarrollado para festejar esta especie de mutación concluyente, al que acudieron medio centenar de personas, estuvo marcado por la presencia de la madre del homenajeado, Antonia Molina, a quien le fue entregado un ramo de flores, y las intervenciones del cronista oficial de la ciudad, Rafael Bellón Zurita, y Luis Foronda, ambos conocedores profundos de la obra del célebre ubetense.
De esta forma, el primero de ellos puso de relevancia la constancia y eficacia de Mauricio Jiménez, además de articular una reflexión literaria en torno a la figura de Muñoz Molina, de quien resaltó su imaginación y la transfiguración poética que hace de Úbeda en sus novelas, donde la ciudad retoma su tono humilde, de canciones populares, de hortelanos, de juegos de niños. «Toda una recreación sentimental que permite al autor volver colectiva su experiencia propia», matizó Bellón. Por su parte, Foronda leyó un pequeño fragmento de 'El jinete polaco' para cerrar el tiempo de la palabra, dando así paso a un aperitivo elaborado para la ocasión.
En concreto, las placas han sido realizadas por Alfarería Alameda, donde los hermanos Alberto y Paco han sabido reproducir la estética de los antiguos azulejos de las calles ubetenses, adaptando de igual modo los diseños a esta iniciativa. Así, se han ido distribuyendo paulatinamente a los largo de estos últimos cuatro meses en los lugares pertinentes, a fin de que la huella del ilustre escritor ubetense sea mucho más visible, puesto que desde el Ayuntamiento no se prodigan demasiado en homenajes hacia el Príncipe de Asturias.
Los gastos de esta ruta literaria, que ascienden a un total de 3.149 euros correspondientes a 18 placas de cerámica, mano de obra, trabajos de imprenta y diseño gráfico, han sido sufragados gracias a la colaboración ciudadana, particulares y empresas, como así lo marcaba la hoja de ruta original del proyecto. Cabe recordar que aunque desde el Ayuntamiento se anunció estudiar el coste de la señalización y su colocación por parte del personal municipal, así como su inclusión como ruta para visitantes en las promociones y acciones turísticas municipales, esta colaboración no llegó nunca a producirse.